El informe ‘Future of Work, AI at Work‘ de LinkedIn señala que más de la mitad de los profesionales globales experimentarán cambios en sus roles debido a la IA. Hoy en día, la formación continua y la adaptabilidad son esenciales para lograr una ventaja competitiva en cualquier organización. De hecho, el mismo informe señala que los puestos de responsabilidad relacionados con la IA se triplicarán en los próximos 5 años.

Sin embargo, las nuevas tecnologías han puesto de manifiesto que existe una importante brecha en la formación en Inteligencia Artificial (IA). Mientras que el 96% de los empleados consideran que la IA generativa tendrá un papel clave en sus puestos de trabajo, solo el 37% reconoce haber recibido formación en IA. Por eso, las empresas deben mejorar la competitividad de sus equipos desarrollando las capacidades en IA de los profesionales, y maximizando así el potencial y la adopción de estas nuevas herramientas.

Para lograr incorporar habilidades, conocimientos sobre IA y mantenerse al día con las tendencias del mercado, es esencial que esta tecnología sea una aliada en la estrategia de L&D de las organizaciones, así como en las herramientas que se manejan en la formación. El sector del e-learning es clave en este contexto por su papel dual como formador en IA e impulsor de la misma, ya que al incorporarla en sus softwares optimiza la experiencia de aprendizaje en tiempo récord. Pero hay muchas razones para aplicar la IA a la formación, ¿quieres conocerlas?

Cómo la IA está revolucionando el L&D tal y como lo conocemos

1. Generación de material didáctico

Crear cursos y contenidos e-learning siempre había requerido recopilar material de diversas fuentes y presentarlo de forma atractiva. Para ello, incluir recursos multimedia, juegos y ejercicios era diferencial a la hora de lograr mayor completitud del curso y retención de conocimientos. Ahora, crear vídeos, gráficos, interactividades, texto, audio…es tan sencillo como ordenárselo a la IA para que genere aquellos recursos que necesitas.

Sin embargo, no todas las herramientas con IA integrada hacen este proceso realmente sencillo e intuitivo. Hay muchas para las que se necesita mantener una conversación iterativa con la IA hasta lograr el resultado deseado, lo que complica y ralentiza la generación de materiales. En cambio, hay herramientas de autor donde este proceso se ha depurado hasta conseguir que con un simple clic el creador del contenido consiga la imagen, texto o ejercicio que necesita, basado en el contenido del curso.

2. Creación de planes de formación adaptables

La personalización y adaptabilidad son clave para que una formación sea efectiva. Con un e-learning potenciado por la IA, es posible ajustar el contenido, el ritmo y el estilo de aprendizaje a las necesidades individuales de cada alumno. Por ejemplo, ofreciendo itinerarios de formación flexibles dentro del propio curso, que se basan en los intereses y objetivos del usuario para llevarle por un contenido teórico específico.

Además, el 75% de las empresas tienen dificultades para encontrar el talento que necesitan para alcanzar sus objetivos empresariales, según un estudio de Manpower. La IA puede identificar las brechas de conocimiento y recomendar los mejores cursos de un catálogo según las soft skills o competencias digitales que se quieran reforzar. Esto puede ayudar a acelerar el aprendizaje y a desarrollar profesionales más productivos.

3. Traducción del contenido en un clic

Las empresas que ofrecen formación en lenguaje nativo, además de evitar problemas de comunicación o interpretación, consiguen que sus profesionales puedan entender y retener mejor la información del curso. Y del mismo modo que mejora la comprensión y el rendimiento de los empleados, aumenta su confianza y motivación respecto a la formación. Por eso, tradicionalmente las organizaciones que querían impulsar su estrategia de L&D destinaban grandes recursos a la traducción de los contenidos para localizarlos a los distintos mercados donde operan.

Con la llegada de la IA al sector e-learning, las capacidades de traducción de contenidos se han multiplicado, al poder generar al instante la traducción de un texto, crear subtítulos en cualquier idioma para un vídeo e incluso generar una voz en off en varios idiomas. Una funcionalidad especialmente útil para los equipos globales o distribuidos en diferentes países, que pueden disponer de los contenidos en su lengua materna en cuanto se produce un curso.

4. Automatización de tareas repetitivas y manuales

Cualquier gestor de la formación o creador de e-learning puede aseverar que hay muchas tareas que se llevan gran parte de su tiempo y serían fácilmente automatizables. La IA puede encargarse de las cuestiones administrativas para que los equipos de L&D aporten valor en lo que hacen. La inscripción al curso, el seguimiento de progreso, la certificación…pueden configurarse como tareas automáticas y permitir a los equipos centrar sus esfuerzos en crear experiencias de aprendizaje atractivas.

En este sentido, otro de los puntos fuertes de la IA es que puede aplicarse también a contenidos antes estáticos, como un curso creado en PowerPoint, que algunas herramientas de autor permiten convertir automáticamente en SCORM. Gracias a esta automatización, no es necesario invertir tiempo en traspasar antiguos contenidos a formato e-learning y puede aplicárseles mejoras de IA que los hagan más atractivos.

Sin duda, la irrupción de la Inteligencia Artificial Generativa en el panorama laboral está transformando cómo trabajamos y añadiendo funcionalidades a las herramientas corporativas, que requieren de una adaptación de los conocimientos del equipo. Por eso es clave que las organizaciones reduzcan esta brecha en la formación de sus profesionales e incorporen aquellas herramientas impulsadas por IA que puedan ayudarles a familiarizarse con ella y aprovechar sus beneficios en el día a día.